Vin Rouge Sonsierra Crianza Vendimia Seleccionada
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8413061511125
8,90 €
Vin Rouge Sonsierra Crianza Vendimia Seleccionada
Le Vin Rouge Sonsierra Crianza Vendimia Seleccionada, appartient au domaine Sonsierra de La Rioja, qui posséde une AOC: La Rioja, Il est composé avec des raisins Tempranillo 100%. Il est fabriqué à partir de vignes de plus de 30 ans situés dans les contreforts de la Sierra de Cantabria récoltées à la main, après une pression douce au froid, le vin est macéré en contact avec les peaux pendant 48 heures pour faire la fermentation alcoolique à une température controlée maximale de 28ºC. Il reçoit la lumière de pompage pendant 8 jours. La macération post-fermentaire dure pendant 48 heures et la fermentation malolactique s'effectue en cuve béton. Pendant 12 mois il serra à 70% dans de nouveaux fûts de chêne américain et 30% la deuxième année dans des futs en chêne français. Minimum de 1 an de repos dans la bouteille jusqu'à raffinement.
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DU VIN
Rouge
% VOL.
13.5
ANCIEN
2015
FORMAT
Bouteille de 75cl
COUNTRY
Espagne
Région
Sonsierra, Rioja Alta
Raisin
Tempranillo
Vieillissement du vin
Crianza12 mois
Allergènes
Sulfites
D.O.
D.O.Ca. RiojaNOTE DE DÉGUSTATION
VUE
De intenso color cereza brillante con reflejos granates.
NEZ
Potente en nariz, con aromas de fruta roja madura perfectamente ensamblados con vainillas, cremas, tostado fino y notas minerales que le otorgan una tremenda complejidad que se va desgranando a medida que se airea en copa.
BOUCHE
Su paladar es intenso y elegante, destacan sus taninos maduros junto a su amplitud y redondez dejando un largo y agradable recuerdo.SAVOIR Sonsierra
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Bodegas Sonsierra nació en San Vicente de la Sonsierra, en el corazón de una comarca con unas características únicas para la vid acompañada de ésta hermosa región, al estar bañada por el Ebro y protegida por la Sierra de Cantabria. En Bodegas Sonrierra mantienen una tradición que, durante siglos, ha moldeado el paisaje hasta hacer de la Sonsierra un paraje de singular belleza donde las vides cubren la tierra, y las construcciones tradicionales ligadas al vino como lagares y guardaviñas, salpican los viñedos. La zona es famosa por los suelos pobres en materia orgánica que limitan la producción aumentando la calidad de los racimos. De estructura equilibrada (arenas, limos y arcillas) y ricos en caliza, son perfectos para el Tempranillo, que aquí se comporta de manera especial. Asi elaboran vinos monovarietales que comienzan a hacerse en la viña, en cada una de las cepas, prestando atención a cada detalle y utilizando tanto técnicas tradicionales como los últimos avances tecnológicos para controlar la máxima calidad durante el proceso. Como resultado tenemos vinos perfectos para la crianza con un buen balance de acidez y concentración de aromas y sabores.
